Prolonga la vida de la batería de tu portátil

Todas las baterías actualmente son de Ion-Litio por lo que no tienen efecto memoria como tenían las antiguas de Niquel-Cadmio o Niquel-Metal Hidruro. Es decir, si recargas la batería cuando está al 75% de carga, la siguiente vez que la cargues no durará sólo un 25%, porque se le "olvide" que estaba cargada al 75%. Descargarla completamente antes de volverla a cargar sólo tiene sentido en la primera carga, después de eso es incluso contraproducente porque se puede dañar si se descarga completamente. Una batería de Ion-Litio, si la cuidamos bien, puede durar entre 950 y 1.200 recargas.

Hay varias formas de prolongar la vida de la batería. Lo mejor que se puede hacer es no usarla cuando tengas un enchufe cerca. Si tienes el portátil directamente conectado a la corriente quítale la batería y así evitarás que se estropee por el calor que se genera. Por otro lado, si usáis el portátil en un lugar frio, la batería se descargará antes, porque gastará más energía para generar el calor que necesita para funcionar.

Cuando quitemos la batería del portátil la podemos dejar almacenada en la nevera. Sí, no es broma, los fabricantes de baterías recomiendan almacenar éstas a 15ºC o menos y dejándolas como mínimo a un 40% de carga. Para hacer esto correctamente debemos envolverla previamente en una bolsa de plástico hermética, intentando sacar todo el aire y cerrándola bien para evitar que la humedad la dañe por corrosión.

Después de usar la batería, también es recomendable quitarla del portátil, ya que al dejarla puesta irá perdiendo carga lentamente, aunque no tengamos el ordenador encendido, ya que circulará una pequeña corriente eléctrica por el portátil.

La verdad es que yo personalmente no pongo la batería de mi portátil en la nevera, pero sí que la quito cuando no la uso, y en cinco años no ha perdido casi autonomía.

Otra forma de mantener la vida de la batería, es intentando que gaste poco, pero de eso ya hablaré en otra entrada.